viernes, 15 de febrero de 2013

Pobres toros, ¡y pobres niños!

Esta semana los toros han sido actualidad, pero no por ellos, si no por la tauromaquia. Ese arte que, en público y con consecuencias reales, lleva a los toros hasta su muerte.

El Congreso de los Diputados admitía a trámite una Iniciativa Legislativa Popular para la declaración de las corridas de toros como Bien de Interés Cultural (BIC) en todo el territorio español. 600.000 firmas respaldaban una propuesta que ha tenido el apoyo del PP, UPyD y UPN, además de la abstención del PSOE. Ahora la norma se debatirá en la Comisión de Cultura del Congreso antes de volver al pleno del Congreso.

Aunque los argumentos exhibidos por los partidos han sido muy políticos, mezclados con los debates nacionalistas y culturales, la opinión de IU-ICV-CHA es que a través de esta acción lo que se pretende es subvencionar (aún más) la "fiesta de los toros".
"La gente ya no va a las plazas pero, ¿vale la pena destinar dinero público para que una minoría vaya a las corridas de toros?. ¿Qué pensará la troika si se recorta en Sanidad y Educación y después el dinero público se destina a las corridas de toros?".
Para PACMA, la ILP trata de reprimir el "creciente" rechazo social. Si finalmente la norma se aprueba quedará por ver si ésta deroga la ley autonómica catalana, por lo que lo de "en Septiembre a los toros a Cataluña" es tan exagerado como revanchista.

Por parte de la Junta de Castilla y León, en boca de la Consejera de Agricultura (y cualquier de Tauromaquia), antes de recoger el premio "Toro de Oro" (¿?), el panorama para el futuro de la tauromaquia tras esta ILP es positivo, a diferencia de los temores y la desazón que pesaban sobre los taurinos hace un año. Castilla y León es la segunda comunidad autónoma en el censo de toros de lidia con más de 41.000 cabezas, además de que este sector es "garantía de equilibrio" de la dehesa, un ecosistema único en Europa. Como si la dehesa y la tauromaquia fuesen indisociables.
Silvia Clemente: "Todo lo que hagamos por defender a los toros es poco".
Si ridículo es considerar el asesinato como hecho de interés, más puede ser enseñarlo a los niños. Inculcar el sadismo, en los colegios de primaria, en lo que propone el Ayuntamiento de Salamanca con el concurso "el toro bravo: un rito".

Se trata de un concurso de redacción y dibujo convocado por la Fundación Salamanca Ciudad de la Cultura y Saberes y el Museo taurino. De esta forma se acercará el mundo de los toros a los escolares de la ciudad.

La verdad es que los salmantinos no lo tienen tan claro como los políticos. ¿Quién se habrán pensado que son?.

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