El 6 de febrero de 2014 300 personas migrantes, todas ellas de origen subsahariano, trataron de acceder a nado a la Playa Tarajal (Ceuta), aprovechando la marea baja provistos de flotadores neumáticos, chalecos salvavidas y rudimentarios chalecos hechos con botellas de agua.
Al menos 15 personas fallecieron ahogadas intentando alcanzar tierra española a causa de los disparos de la Guardia Civil con pelotas de goma y el lanzamiento de botes de humo siguiendo instrucciones políticas. Veintitrés personas que si lograron llegar a costa fueron inmediatamente devueltas de forma colectiva directamente a Marruecos de forma ilegal, sin que en España se incoara procedimiento alguno, sin posibilidad de solicitar asilo y sin que se les prestara asistencia humanitaria, como prescriben las mínimas normas de dignidad humana y las leyes nacionales e internacionales.
Sin fronteras, sin víctimas, sin devoluciones ilegales.Informe-dossier de los sucesos del 6 de febrero de 2014.
Campaña Estatal por el Cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros.
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